Se propicia una amplia formación en Ciencias Naturales, que arranca desde las primeras experiencias organizadas durante los comienzos de la escolaridad hasta culminar con proyectos más complejos en la escuela secundaria.
El propósito principal de la formación en ciencias es lograr que los alumnos terminen su escolaridad siendo competentes desde el punto de vista científico. Esto implica haber adquirido los conocimientos científicos apropiados para la edad del alumno y la capacidad de usar ese conocimiento para identificar problemas, adquirir nuevos conocimientos, explicar fenómenos científicos y extraer conclusiones sobre cuestiones relacionadas con la ciencia. Asimismo, comporta la comprensión de los rasgos característicos de la ciencia, entendida como un método del conocimiento y la investigación humanas, la percepción del modo en que la ciencia y la tecnología conforman nuestro entorno material, intelectual y cultural, y la disposición a implicarse en asuntos relacionados con la ciencia y con las ideas de la ciencia como un ciudadano reflexivo.
Con ese objetivo como meta, se trabaja integrando el análisis teórico de los contenidos con el trabajo en el laboratorio como recurso fundamental para la construcción del conocimiento escolar. Asimismo, se organizan salidas didácticas y proyectos que posibilitan que el alumno tome contacto directo con diferentes espacios en los que se promueve el aprendizaje de las ciencias. Esta formación científica se aborda, según el área, en inglés y castellano. Asimismo, adquieren una comprensión de las ciencias y la tecnología que resulta crucial para la preparación para la vida de los jóvenes en la sociedad contemporánea.