Entendemos que las lenguas, tanto Inglés como Castellano, deben abordarse de manera integral, de manera tal que los alumnos puedan usarlas no solo para comunicar sino para pensar. No cabe duda de que los alumnos deben poder poner en juego recursos comunicativos en las lenguas que aprenden, pero resulta igualmente importante, considerando la mediación del lenguaje en la construcción del pensamiento, que puedan movilizar recursos cognitivos y reflexivos de más alto orden que los preparen tanto para rendir exámenes internacionales de diversas disciplinas como para incorporarse a la vida universitaria y laboral en un futuro no demasiado distante.
Es con dicha meta que se trabaja con unidades temáticas y con la literatura como eje transversal. Se favorece la lectura de textos diversos para, por un lado, poner a los alumnos en contacto con textos literarios de diversas culturas, autores, géneros, estilos y poéticas, que les permitan un ingreso paulatino en la comunidad de lectores y en la cultura universal, y por otro con textos informativos, expositivos y argumentativos de diferente índole, frente a los cuales deban ir desplegando de manera cada vez más autónoma y autorregulada diferentes estrategias de lectura y comprensión que les permitan no sólo aprender sino también convertirse en lectores críticos y ciudadanos responsables.
En el ámbito de la producción escrita se contempla la escritura como un proceso complejo con diferentes niveles de avance e instancias de revisión en las que los alumnos puedan aprender y desplegar estrategias de planificación, textualización, autoevaluación y autocorrección cada vez más autónomas.
Se fortalece la oralidad de nuestros alumnos, de manera tal que puedan expresarse oralmente con fluidez y precisión, utilizando un vocabulario específico, adecuando el registro al propósito y la audiencia de cada exposicion, manejando los componentes no lingüísticos de la comunicación y utilizando ayudas visuales apropiadas.